Sencilla
pero fantástica masa casera para que los niños jueguen con ellas y dejen volar
su imaginación creando sus propias “obras de arte” al moldearlas. Su textura
permite un fácil moldeado y la espuma le proporciona un estupendo aroma. Los
niños estarán encantados con ella.
Para preparar nuestra masa sensorial, sólo
necesitamos tres ingredientes:
- Harina de maíz (maizena)
- Espuma de afeitar
- Colorante alimentario.
Las cantidades de los ingredientes no son fijas,
hemos de añadir espuma si la masa nos queda muy seca, o a la inversa si nos ha
quedado más líquida. Igual pasa con el colorante el cual lo añadiremos según la
intensidad de color que queremos que tenga la masa.
En primer lugar colocamos en un recipiente
grande una cantidad generosa de harina de maíz. A continuación añadimos la
espuma y mezclamos. Una vez que empieza a tomar forma la masa añadimos el
colorante alimentario del color elegido, y seguimos mezclando hasta que la masa
se compacte, y esté lista. Cómo este proceso puede durar un poquito, podemos
dejar que sean los niños los que hundan sus manitas en ella para mezclarla, de
esta manera se divertirán y participarán de manera activa en su preparación.
Para conservarla sólo debemos guardarla en un
recipiente cerrado en la nevera. Puede durar en perfecto estado hasta una
semana.
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